El Gobierno tomó el control de la Sareb, en abril de 2022, con un triple objetivo como es, impulsar el parque público de vivienda, apoyar la inclusión social y mejorar la vertebración y cohesión en todo el territorio nacional, siendo la intención realizarlo con el mejor uso posible de los activos públicos para hacer una gestión responsable y velar por el dinero de los contribuyentes.
Según el propio Gobierno, la Sareb dispone de un ‘stock’ potencial de vivienda terminada de 21.000 unidades, además de otras 14.000 habitadas y de suelos disponibles para la promoción de hasta 15.000 nuevas viviendas. Por eso, para aprovechar estos activos, el Gobierno ha puesto en marcha un plan con tres ejes:
En primer lugar, la movilización de las 21.000 viviendas para uso social que se movilizarán a través de acuerdos de venta a las comunidades autónomas para alquiler social asequible.
Además, se contemplan convenios de cesión temporal de viviendas para uso social, tanto a Administraciones Públicas como a entidades sin ánimo de lucro, prestando atención especial a las zonas en riesgo de despoblación y a los colectivos vulnerables.
En segundo lugar, se destaca la gestión proactiva de las 14.000 viviendas ya habitadas. En este sentido, el objetivo es identificar a las familias vulnerables y ofrecerles alquileres que tengan en cuenta su nivel de renta de manera que les ayude a regularizar su situación, en la búsqueda de empleo y en el acceso a los servicios sociales o la solicitud del Ingreso Mínimo Vital.
Por último, el plan se refiere a la cesión de suelos urbanizables mediante un esquema de colaboración público-privada para construir unas 15.000 viviendas adicionales destinadas al alquiler asequible.
Distribución territorial de las viviendas disponibles:
Valencia
4.950
Cataluña
3.539
Castilla y León
2.288
Murcia
2.093
Andalucía
2.040
Castilla-La Mancha
1.534
Galicia
1.285
Cantabria
611
Aragón
580
Madrid
455
La Rioja
388
Extremadura
305
Canarias
303
Asturias
171
Baleares
120
País Vasco
81
Navarra
25
Ceuta
–
Melilla
–
TOTAL
20.768